Desde la butaca del cine todo era inmenso, colorido y brillante. Las montañas del oeste, los edificios en Nueva York, el Río Grande, los revolucionarios y la Huasteca.
El cartel de Hollywood olía a imposible al igual que las fotografías de María Félix. Todo quedaba demasiado lejos y lucía exacerbadamente grande. Todo era ajeno.
El cine contaba historia de los otros pero tenía la magia de convertir aquellas vidas ajenas en propias cuando me transformaba en el héroe o heroína de la historia.
Fue así que desde mi infancia estuve entre hermosas mujeres vestidas de huipil y hombres con poblados bigotes en su rostro. Viajé del sur al norte del continente, escapé a caballo robando a una hembra, comí tacos y bebí tequila mientras guitarrones y trompetas les cantaban a la luna desde un balcón tipo español.
No lo sabía entonces, años más tarde viviendo en el norte desde la aborrecida literatura de autoayuda descubrí que le llamaban: visualización.
Esa cosa de vivir teniendo entre las manos lo que se desea y aún no ha sucedido. Así, como si fuese cierto. Como si las películas fuesen la antesala del porvenir.
La ilusión se vistió de futuro cuando treinta años más tarde el cartel de Hollywood desde las montañas de Griffith Park se alzó como un ayuda memoria. Sus dimensiones cambiaron. Lo inmenso se convirtió en pequeño y el sueño se transformó en rutina.
Hoy desde un café llamado “Ecétera” cuya dueña es argentina, casi sobre el bulevar de las estrellas, inicio este blog que pretende contar parte de mi historia y de la historia que las revistas no cuentan.
“Welcome to Jolibut” es un relato de mi estadía -sin ser turista- desde la ciudad donde jamás he podido ver estrellas en el cielo, pero sí en el piso.
Victoria García.
Los Ángeles, CA
2011
Los Ángeles, CA
2011
Llevo años leyéndote, y años esperando que "reabrieras" el kisoko y me alegra que lo hayas hecho.Veo un tinte distinto en la escritura, más asentada, mejor redactada (no que ante no lo fuera) pero más... pulida. Can't wait to read the next post.
ResponderEliminarQuise decir "kiosko" y "antes" jaja
ResponderEliminarGracias Bettina por ser fiel lectora de mis historias. Y sigue aportando tu feedback porque de ahi es mi mejora. Hemos vuelto al ruedo, a las raices...
ResponderEliminarEstimada, un placer vovlver a leerte. Tanta cosa para compartir y tanta cosa por leler desde este lado (espero!).
ResponderEliminarBienvenida y bienvenidos nosotros a tus relatos.
Salú!
¡Gracias Ale! Bievenida. El mundo bloguero tira y tira ;) Espero te guste. Abrazos.
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